lunes, 23 de septiembre de 2013

Pero haberlas "haylas"...

No se muy bien si existe la mala suerte o si es una simple apreciación del que sufre una serie de acontecimientos adversos pero viendo la cadena de averías que llevamos en el pequeño grupo que salimos habitualmente empiezo a creer y mucho... y más todavía en expresiones como "os a mirado un tuerto".



Vamos a hacer un repaso de las últimas averías, ya que tengo unas cuantas rutas en cartera pero las circunstancias no lo han permitido.

El día 15 de agosto sufrí una caída que no tuvo graves consecuencias pero que me dejó un brazo bastante mazado y sin poder salir al monte hasta septiembre.

El día 5 de septiembre volví a salir al monte, una ruta corta para ver como respondía el cuerpo. Ese día se cortó un neumático y a pesar de ser tubuless y llevar líquido sellante no fue suficiente. Tocó desmontar todo, poner una cámara y una vez en casa reparar el neumático, limpiar bien todo, y volver a tubelizar.

El día 8 fue la única salida sin incidentes.

El jueves 12 volvimos a salir... en esta ocasión fue el amortiguador el que dijo basta. Me acerqué hasta la tienda y me confirmaron la mala noticia: amortiguador estropeado y hay que mandarlo al SAT de Fox y que, al menos, van a ser 3 semanas de espera. Como hasta el lunes no le iban a tocar, que la llevara y la usara en fin de semana.

Domingo día 15. Estábamos disfrutando de una ruta preciosa por la zona de A Pastoriza cuando a mitad de ruta y sin saber muy bien como, un cambio se mete entre los radios quedando totalmente retorcido, rompiendo las patas del cambio y la patilla del cuadro. Un apaño para volver a piñón fijo y para casa por carretera.

El lunes 16 llevo la bici al taller. Por suerte, el martes 17 me avisan que ya está lista, que me habían montado un amortiguador prestado para poder seguir saliendo. Esto que parece una buena noticia fue una solución un tanto envenenada.... Resulta que a las marcas les gusta poner su punto de distinción en algunos componentes y el amortiguador era uno de ellos: en vez de montar uno de la habitual medida 190x50 los señores de Giant decidieron que mejor montar uno prácticamente exclusivo de 184x44. No parece demasiada diferencia, pero después de pasar por las bieletas el resultado es una bici con varios cm más de altura de pedalier y ángulos más verticales con lo cual todo su geometría queda trastocada. Y para acabar de pintar un paisaje oscuro, el control de rebote está averiado con lo que su funcionamiento es más parecido a una cama elástica que a una bici. En fin... habrá que esperar a que vuelva el mío.

El jueves 20 lo volvimos a intentar. A los 20 km de camino de Santiago reventó uno de los retenes de la horquilla y empezó a perder aceite. Vuelta por carretera y bici al taller. Aún sigo esperando a que me la den...


Pero el domingo día 22 los compañero volvieron a salir al monte... ¿Resultado? 15 km y otro cambio roto.

Lo dicho, creer no creo pero haberlas haylas....






4 comentarios:

  1. Madre mía, ten cuidado por los pasos de peatones, qué te veo gafado.

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  2. Juas... pues no te cuento nada de otras averías.... móvil, coche, pc....

    Una bruja quiero...!!!!

    :-D :-D

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  3. Y se puede romper un cambio otra vez pero.... que sea exactamente igual que la semana pasada??? Se mete entre los radios y se retuerce allí...

    Como coja al tuerto lo pongo a recitar prosa!!!

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  4. Mañana toca dar pedales entre 4paredes....se me caerá la casa encima?...saldrá la bici volando??....mieditooooo

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